La enseñanza de Jesús: Si te pegan en una mejilla, pon la otra

¿Alguna vez te has preguntado cuál es el verdadero beneficio de la enseñanza «si te pegan en una mejilla, pon la otra»? Este principio, transmitido por Jesús en el Evangelio de Mateo, nos invita a reflexionar sobre el poder transformador del amor y la resistencia pacífica ante la adversidad. En esta breve reflexión exploraremos cómo este concepto puede ser una herramienta poderosa para promover la paz y la reconciliación en medio de conflictos y desafíos.

El mandato de Jesús: Si te pegan en una mejilla, pon la otra

El mandato de Jesús de «si te pegan en una mejilla, pon la otra también» se encuentra en el Evangelio de Mateo, capítulo 5, versículos 38 al 42:

«38 Oísteis que fue dicho: ojo por ojo y diente por diente. 39 Pero yo os digo: no resistáis al que es malo; antes, a cualquiera que te hiera en la mejilla derecha, vuélvele también la otra. 40 Y al que quiera ponerte demanda y quitarte la túnica, déjale también la capa. 41 Y a cualquiera que te obligue a llevar carga por una milla, ve con él dos. 42 Al que te pida, dale; y al que quiera tomar de ti prestado, no se lo rehúses.»

Este pasaje nos enseña sobre la importancia de responder a la violencia y la injusticia con amor y generosidad, siguiendo el ejemplo de Jesús en su vida terrenal.

La enseñanza de Jesús sobre la no resistencia al mal

La Biblia nos presenta el concepto de «poner la otra mejilla» como una enseñanza de Jesús que va en contra de la respuesta natural ante la agresión. En Mateo 5:39, Jesús dice: «Pero yo les digo que no hagan frente al que les hace mal; al contrario, si alguien te pega en la mejilla derecha, preséntale también la otra.» Esta enseñanza desafía nuestra tendencia a responder con violencia o venganza cuando somos agraviados.

Jesús busca enseñarnos un nuevo paradigma de amor incondicional y perdón, que va más allá de lo que el mundo considera justo o razonable. Al poner la otra mejilla, estamos demostrando una actitud de humildad, paciencia y confianza en Dios como nuestro defensor.

El contexto cultural y social de la época de Jesús

Es importante tener en cuenta el contexto en el que Jesús pronunció estas palabras. En la sociedad judía del primer siglo, la idea de «poner la otra mejilla» era revolucionaria y contracultural. En aquella época, la agresión física era vista como una afrenta a la dignidad y honor de una persona, y se esperaba una respuesta en igual medida.

Al pedirnos que pongamos la otra mejilla, Jesús está desafiando las normas sociales y culturales de su tiempo, invitándonos a romper con el ciclo de violencia y buscar la reconciliación. Esta enseñanza es radical y exige una transformación profunda en nuestra forma de pensar y actuar.

El ejemplo de Jesús como modelo a seguir

Jesús no solo enseñó sobre poner la otra mejilla, sino que también lo vivió en su propia vida. Durante su arresto y crucifixión, Jesús fue maltratado, insultado y golpeado, pero nunca respondió con violencia o enojo. En lugar de buscar venganza, Jesús perdonó a sus agresores y oró por ellos.

Al seguir el ejemplo de Jesús, podemos aprender a responder al mal con bondad, compasión y misericordia. Es en la vulnerabilidad y la humildad donde encontramos la verdadera fuerza y el verdadero poder del amor de Dios.

El llamado a la no resistencia y la búsqueda de la paz

La enseñanza de Jesús sobre poner la otra mejilla no significa ser pasivos frente a la injusticia o permitir el abuso. Más bien, nos invita a resistir al mal no con la misma violencia, sino con un amor que busca la transformación y la reconciliación.

Al optar por la no resistencia, estamos manifestando nuestra confianza en que Dios es quien hace justicia y defiende a los oprimidos. El verdadero desafío está en mantenernos firmes en nuestra fe y en mostrar el amor de Cristo incluso en medio de las pruebas y dificultades.

¿Qué significa la enseñanza de «si te pegan en una mejilla, pon la otra» en la Biblia?

En el contexto de la Biblia, la enseñanza de «si te pegan en una mejilla, pon la otra» significa practicar la paciencia, el perdón y la resistencia pacífica ante la adversidad o el maltrato, siguiendo el ejemplo de Jesús y demostrando amor incluso hacia aquellos que nos hacen daño.

¿Cómo podemos aplicar el mandato de poner la otra mejilla en situaciones de conflicto o violencia?

Poner la otra mejilla significa no responder con violencia ante una agresión. En el contexto de la Biblia, podemos aplicar este mandato practicando la paciencia, amor al prójimo y buscando la reconciliación en lugar de la venganza.

¿Existen ejemplos en la Biblia donde se haya practicado la actitud de poner la otra mejilla como respuesta a la agresión?

Sí, en Mateo 5:39 Jesús enseña a poner la otra mejilla como respuesta a la agresión, promoviendo la no violencia y el amor hacia los enemigos.